Concepto de herramienta

La palabra herramienta proviene etimológicamente del vocablo latino “ferramentum”, compuesta por “ferrum” = hierro y “mentum” = instrumento. Podemos definir a las herramientas como aquellos instrumentos externos al propio cuerpo, que facilitan las tareas, economizando esfuerzo y tiempo.

Al igual que el resto de los animales, los primeros hombres usaban su cuerpo para conseguir lo que necesitaban: cavaban pozos y cazaban con sus manos, cortaban la carne con sus dientes, etcétera. Pero el raciocinio humano, y la posibilidad del movimiento de sus manos, que le permiten agarrar, le posibilitó paulatinamente diferenciarse del resto de los seres animales, y comenzó a crear elementos que le facilitaban sus labores, que fueron evolucionando desde objetos muy simples, hasta las sofisticadas y complejas herramientas actuales.

Las primeras herramientas usadas por el hombre primitivo fueron elementos que utilizó en su estado natural y que los encontró en su entorno, como piedras, huesos de animales y palos, que aprovechó como armas o medios defensivos.

Las herramientas metálicas surgieron con el uso de materiales como el bronce y el hierro.

Esto marcó un avance significativo en la tecnología humana.

Estos nuevos materiales permitieron la creación de herramientas más duraderas y eficientes, revolucionando la forma en que se realizaban las tareas cotidianas.

El bronce, una aleación de cobre y estaño, fue utilizado para fabricar herramientas más resistentes al desgaste.

Mientras tanto, el hierro, al endurecerse, ofreció mayor resistencia, facilitando actividades de construcción y agricultura más productivas.

Hace aproximadamente 3.000.000 de años, el hombre se preocupó por tallar piedras, golpeando con una dura otra más blanda, como el silex, por ejemplo, haciéndoles puntas de flecha para aprovecharlas como armas, o creándoles bordes filosos, que le permitieran cortar, carne o madera. Así fueron apareciendo, el cuchillo, el hacha, el serrucho y el torno.

El desarrollo de herramientas mecánicas, como la palanca, la cuña y la polea, representó un avance importante en las labores humanas.

Su aplicación permitió la construcción de grandes estructuras, como las pirámides egipcias, al facilitar la tarea de levantar y mover grandes bloques de piedra.

Estas herramientas mecánicas ampliaron las capacidades humanas, disminuyendo el esfuerzo físico necesario.

Al frotar las piedras es probable que haya descubierto el fuego, lo que le permitió cocer sus alimentos, ahuyentar a animales peligrosos y calentarse.

Con huesos de animales o espinas de pescado crearon las primeras agujas, usando como hilos fibras de plantas o tiras finas de cuero, con lo que pudieron coser sus vestimentas.

Paulatinamente fue mezclando sus inventos para crear otros más complejos, por ejemplo al mango del martillo le agregó una piedra afilada en forma de sierra, y creó la hoz, que le sirvió para recoger la cosecha.

La Revolución Industrial transformó radicalmente la producción de herramientas.

Introdujo maquinarias impulsadas con energía y técnicas de producción en masa.

Este cambio democratizó el acceso a herramientas avanzadas y aumentó la capacidad de fabricación.

Permitió la construcción de infraestructuras a gran escala.

La disponibilidad y diversidad de herramientas se expandieron, afectando positivamente la eficiencia en múltiples industrias.

Actualmente usamos innumerables herramientas: lápices para escribir, gomas para borrar, cintas para correr, automóviles para movilizarnos más velozmente, computadoras para escribir o conectarnos con el mundo, etcétera.

Existen algunas herramientas que son producciones intelectuales, como las herramientas didácticas, usadas para que se logre un proceso eficaz de enseñanza y aprendizaje.

Fingermann, H. (29 de diciembre de 2012). Concepto de herramienta. Deconceptos.com. Actualizado el 17 de junio de 2025. https://deconceptos.com/tecnologia/herramienta