Concepto de ofrenda

Una ofrenda es un ofrecimiento que se hace a las divinidades  o seres sobrenaturales, para hacerles conocer que son objeto de su adoración, en agradecimiento por favores recibidos o para que se les cumpla lo que les han peticionado. Puede tratarse de regalos o sacrificios. Por extensión se aplica a cualquier obsequio que se le hace a alguien, que puede estar vivo o muerto.

Etimología

La palabra ofrenda se originó en el latín medieval offerenda, a su vez derivado del verbo offere, en el sentido de ofrecer.

Ofrendas a la divinidad

Desde antiguo el hombre necesitó creer en fuerzas sobrehumanas que gobernaban el mundo y los llamó dioses, a los que temían, respetaban, amaban y deseaban que los escuchara en sus súplicas. Eran dioses a la vez, capaces de hacerles enormes favores pero también propinarles terribles castigos, y para ello, para que estén contentos y no los castiguen, debían rendirles culto y darles ofrendas, las que variaron en las diversas culturas, desde productos alimenticios, joyas, hasta dedicarles sacrificios de animales y humanos. Los egipcios, por ejemplo, ofrecían a sus dioses agua, vino, leche y miel. Para los muertos, escribían fórmulas de ofrenda, que siempre comenzaba con la frase “ofrenda otorgada por el rey”, ya que el faraón era el que oficiaba de intermediario entre la población y los dioses. Luego se dirigía a uno de los dioses de los muertos, como Asiris o Anubis, y a continuación, una persona viva en representación del muerto le ofrecía los regalos. Los faraones eran adorados como dioses, y por ello, cuando morían, en ocasiones se mataba también a sus sirvientes como ofrenda, para que pudieran seguir estando a su servicio tras su llegada al otro mundo.

Los pueblos aborígenes americanos, antes de la llegada de los españoles, acostumbraban a hacer sacrificios humanos para complacer a sus dioses, como ofrenda.

Los vikingos hacían a sus dioses ofrendas de animales, pero ante grandes catástrofes, recurrían también a los sacrificios humanos.

Los griegos acostumbraban a ofrendar a sus dioses superiores, con vino, frutas y panes, y a los inferiores, una bebida hecha con agua, leche y miel; y panecillos de miel. Los bienes sacrificados, que también podían ser animales, se quemaban en el altar, mientras se hacían sonar las flautas. Los romanos organizaban las ofrendas a través de pontífices. Los muertos de cada familia eran los dioses del hogar, y también se les hacían ofrendas para que su estadía en el otro mundo fuera placentera y ayudaran a los vivos.

Con el monoteísmo las ofrendas a Dios, de sacrificios de animales continuaron. Los hebreos los sacrificaban en el templo para rendir culto a Dios. Con el cristianismo, el sacrificio de Jesús, termina con la práctica del sacrificio de animales, llamándoselo por ello el “Cordero de Dios”.

Ofrendas patrias

En días patrióticos se acostumbra a hacer ofrendas de flores, canciones, actos, discursos, etcétera para honrar a la patria y a los próceres que contribuyeron a forjarla o a enaltecerla. A ellos también se les hacen bustos y estatuas en lugares públicos. También se rinden homenajes a modo de ofrendas a los soldados y jefes militares, que dieron su vida, la ofrendaron, para defenderla

Ofrenda a los muertos

En México, el 1 y 2 de noviembre en conmemoración al día de los muertos se hacen ofrendas a los difuntos en altares decorados con flores, papel picado, calaveras de azúcar y el plato que cada uno de esos seres queridos que ya no están en este mundo disfrutaba saborear, para que sus almas convivan con sus seres queridos.

Citar este artículo

Fingermann, H. (20 de marzo de 2024). Concepto de ofrenda. Deconceptos.com. https://deconceptos.com/ciencias-sociales/ofrenda

Buscar otro concepto