Concepto de antioxidante

Un antioxidante es aquello que impide la oxidación. Puede usarse para el tratamiento de metales, donde se elimina la oxidación, producida por el contacto con el oxígeno, y se evita la corrosión, momento donde el material ya ha sufrido daños irreversibles. En el organismo, también se produce la oxidación a causa del oxígeno, que si bien es absolutamente necesario para la vida, puede producir daños a las células, que se combaten o retrasan su efecto, con los antioxidantes, que pueden ser naturales o industriales. La oxidación puede deberse a procesos endógenos (ocurren dentro del organismo) mientras se cumplen funciones vitales como la respiración o la digestión, u originarse por factores externos, como el humo del tabaco, la ingesta de bebidas alcohólicas o las radiaciones, que por su cantidad, el organismo no puede contrarrestar.

Principales antioxidantes

Sin lugar a dudas, las plantas y sus frutos, son las mejores fuentes de antioxidantes naturales, ya que por un proceso de autodefensa contra los rayos ultravioletas al que están expuestas, los han generado. Entre los principales antioxidantes mencionaremos:

Los beta carotenos que ayudan a proteger la piel del envejecimiento de la acción de los rayos solares, aumentan las defensas y protegen la visión. Se encuentran entre otras verduras, en las zanahorias, en la calabaza, en la patata dulce y en los pimientos.

La luteína uno de los dos fundamentales carotenoides que se ubican en la mácula y la retina del ojo, actuando como un filtro de luz, para protegerlos. Entre los alimentos ricos en luteína podemos mencionar a la yema de huevo, el maíz, la espinaca, la calabaza y el kiwi.

El licopeno, presente por ejemplo en la sandía y el tomate, adjudicándosele la protección contra el cáncer de próstata, el de vejiga y para controlar la diabetes.

El selenio,  es un oligoelemento que se necesita en dosis pequeñas, que generan enzimas antioxidantes capaces de prevenir la toxicidad por exposición a metales pesados y algunos tipos de cáncer. Está presente en las verduras, en las carnes, en las nueces, en los huevos y en los pescados.

Las vitaminas A, C y E también son poderosos antioxidantes.

Todos estos antioxidantes si no se consumieran de modo natural pueden ingerirse como suplementos dietarios, bajo vigilancia médica (pues los excesos pueden resultar contraproducentes) en preparados farmacéuticos.

¿Contra quién actúan?

La función de los antioxidantes es luchar contra la acción destructiva de los radicales libres, que son moléculas inestables y con un electrón sin aparejar, que buscan en otros componentes, lograr emparejarse, y así desestabilizan a otras moléculas próximas, a las que les quitan su electrón. Los radicales libres se generan en el metabolismo celular, y cuando se acumulan en las células, provocan daño a otras moléculas, como las proteínas, los lípidos y el ADN. Las células van envejeciendo porque permiten el ingreso de oxígeno en los organismos aerobios, y la oxidación, cuando las fuerzas oxidantes son más que las defensas antioxidantes. En este caso se produce lo que se conoce como estrés oxidativo, que aligera el proceso de envejecimiento y promueve la aparición de varias enfermedades: cardiovasculares, cáncer, cataratas, demencia, entre otras, debilitando el sistema inmune.

La inestabilidad de los radicales libres, se logra combatir, al consumir antioxidantes, pues estos liberan en el torrente sanguíneo electrones, sin perder estabilidad, y logran depurar el oxígeno activo con antelación al daño celular que podrían causar.

Fingermann, H. (29 de septiembre de 2023). Concepto de antioxidante. Deconceptos.com. https://deconceptos.com/ciencias-naturales/antioxidante