Concepto de condescendencia

La palabra condescendencia procede del latín “condescendentia”, a su vez, de condescender, del latín “condescendĕre”, vocablo integrado por el prefijo totalizador “con”, y el verbo “descendere” que significa descender o bajar, siendo el sufijo “nta” indicador que se trata del agente activo de la acción, y en su caso, el sufijo “ere”, es formador de verbos.

La condescendencia es una actitud humana, que importa adaptarse a los gustos, necesidades y requerimientos de otro, descendiendo de nivel, para ajustarse a las pretensiones o deseos de terceros, por voluntad propia y no por obligación (no es condescendencia por ejemplo, que alguien le dé el gusto a otro, pues se siente amenazado) lo que puede resultar loable cuando se lo hace con bondad y desinterés, por ejemplo: “Soy condescendiente con mi hermano pequeño, pues ha sufrido mucho cuando falleció nuestra madre, y trato de que se sienta protegido por mí y por eso le doy algunos gustos extras” o “El maestro fue condescendiente con la alumna, cuando le explicó que no pudo traer su tara, por haber sufrido un accidente doméstico”.

Si bien puede ser causada por un acto de generosidad y en el deseo de que la otra persona se sienta halagada, tratándola de modo comprensivo y empático, debe cuidarse de que con ello no se hiera la autoestima ajena; pues una cosa es ser solidario y protector y otra muy distinta es subestimar las capacidades ajenas. El condescendiente, en muchos casos, se siente en una posición de poder o superioridad frente a aquel que recibe la consideración, y esto hace que quien aparece como receptor de la acción se sienta incómodo y hasta ofendido.

Ejemplos: “Mi vecino, de modo condescendiente, me explicó cómo debía barrer mi vereda, dejando en claro que mi modo de hacerlo no era el correcto”, “El empleado trató al turista con condescendencia, mostrándole con una sonrisa burlona, donde estaban los productos de la tienda, que para él estaban bastante visibles”, “El patrón, con condescendencia, le dijo al empleado que le enseñaría a ser más prolijo en su trabajo” o “Me irritó la condescendencia con la que me trató mi amigo, al decirme que mi parte del trabajo grupal no estaba correctamente hecha, y que él la haría de nuevo, de modo eficiente”.

También se puede ser condescendiente con los animales, y en este caso, es positivo, ya que necesitan de nuestro amparo y abrigo; aunque si bien son inferiores a nosotros, intelectualmente, no debemos olvidar que muchas veces, suelen darnos enseñanzas que nos sorprenden; y que nosotros no hicimos la naturaleza, sino que somos parte de ella también, y por eso debemos respetarlos y amarlos, con total generosidad, y sin subestimarlos.

En el cristianismo, la condescendencia de Dios, es su actitud de acercarse a los humanos, descendiendo hasta ellos, desde su incuestionable superioridad, lo que hizo mandando a su propio Hijo, Cristo, a salvar a la humanidad.

Fingermann, H. (21 de marzo de 2023). Concepto de condescendencia. Deconceptos.com. https://deconceptos.com/ciencias-sociales/condescendencia