Concepto de Constitución
Constitución puede referirse al acto de constituir o formar alguna cosa, por ejemplo: «Se aprobó la constitución de un nuevo partido político» o «La constitución del equipo de fútbol estuvo a cargo del técnico», o designar los elementos que conforman una estructura: «La constitución básica de la célula, está dada por un núcleo, un citoplasma y una membrana celular envolvente»; pero también puede adquirir un sentido político referido a una norma general que organiza un Estado en cuanto a sus principios rectores, las autoridades que lo gobiernan y los derechos de sus ciudadanos.
Etimología
Constitución tiene un origen latino. Procede de constitutio, a su vez del verbo constituere, en el sentido de organizar o establecer.
Constituciones en la antigüedad
Ya Aristóteles tuvo la idea de reunir sistemáticamente las leyes de su tiempo, en lo que se conoce como la Constitución Política de Atenas, del siglo IV, que fue hallada en Egipto en el año 1891, que sería el primer libro de otros ciento cincuenta y ocho. En la primera parte de la obra recorre la historia política de Atenas y en la segunda, detalla la organización del Estado.
En la Roma imperial (desde el año 27 antes de nuestra era) las leyes comiciales, que habían sido fuente de derecho en la República van siendo reemplazadas paulatinamente, por la ley emanada de la voluntad del emperador, a las que se llamaron leges o constituciones imperiales. Algunas eran leyes generales, destinadas a toda la población, conocidas como edictos; pero otras constituciones eran órdenes para los gobernadores de provincia, respuestas a consultas de magistrados y particulares sobre temas judiciales o sentencias que resolvían casos controvertidos. A partir del año 284, serán la fuente legislativa por antonomasia en Roma.
Constituciones nacionales modernas
Las constituciones pueden emanar del poder soberano, como el caso de un rey que la dicta, llamándose por eso, otorgadas, como es ejemplo el Estatuto Real de España de 1834. Cuando emana del Parlamento, se denominan impuestas; como el caso de La Constitución francesa de 1791; mientras las que emanan de un pacto social, se llaman pactadas, interviniendo el poder estatal pero también la ciudadanía o un sector de ella, que es lo que prevalece en la actualidad.
El constitucionalismo clásico nacido con la Constitución Norteamericana de 1787 y la Revolución Francesa de 1789, era de carácter liberal, en defensa de los derechos individuales y con poca intervención del Estado. A partir del siglo XIX surge el constitucionalismo social con mayor intervención estatal, protegiendo a los más débiles de la sociedad: trabajadores, niños, ancianos, enfermos, etcétera.
La Constitución es la ley suprema de un Estado que establece su organización, su funcionamiento, su estructura política y los derechos y garantías de los habitantes de ese estado. Se llama precisamente Constitución pues “constituye” la nación políticamente organizada, le da sus principios, y la distingue de otros estados. Está precedida generalmente de un preámbulo que establece sus antecedentes y sus fines.
Es la ley de las leyes o la madre de todas las demás normas, pues si las otras están en contradicción con ella, pueden ser declaradas inconstitucionales. Algunas consisten en textos breves, dejando a las leyes la reglamentación de los derechos que otorgan; y otras son muy extensas, y más explicativas.
La Constitución es obra del poder constituyente, ejercido por el pueblo, que en las democracias, es donde reside el poder soberano, que establece los poderes constituidos (Poder Legislativo, Poder Ejecutivo y Poder Judicial) mediante un contrato social donde se llega a acuerdos sobre la organización del país y las libertades individuales en vistas a los ideales comunes y al bienestar general.
La gran mayoría de Constituciones son escritas, aunque las hay basadas en las costumbres (Common Law) como sucede en Inglaterra.
Generalmente la reforma de la Constitución requiere un procedimiento menos flexible que el requerido para reformar las leyes ordinarias, por eso se llaman rígidas, que son la mayoría. Algunas como la de Italia, no permiten su reforma y por eso son constituciones pétreas. Cuando se reforman igual que las leyes ordinarias se llaman constituciones flexibles (Inglaterra).
Fingermann, H. (15 de enero de 2009). Concepto de Constitución. Deconceptos.com. Actualizado el 25 de agosto de 2023. https://deconceptos.com/ciencias-juridicas/constitucion
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