Ciencias Naturales Archive

agraciado

La palabra agraciado, es el participio del verbo regular, no pronominal y de primera conjugación, agraciar, integrado por el prefijo “a” del latín “ad” (“hacia”), “gracia”, del latín “gratia”, en el sentido de algo grato o un favor o concesión, más el sufijo “ado” del latín “atus” formador de participios de verbos de primera conjugación.

agobiado

La palabra agobiado es el participio del verbo regular, pronominal y de primera conjugación, agobiar, que `procede etimológicamente, de latín “gibbus” que se traduce como giba o joroba, denotando, estar agobiado, sufrir un peso, tan grande, que parecería cargarse con una joroba. La persona o animal que se encuentra en ese estado de agobio, siente

copete

La palabra copete se emplea como diminutivo de copo, variante de copa, del latín “cuppa”, y se refiere a aquello que se asemeja a un copo de nieve o a cualquier otra cosa, que luce sobresaliendo de una superficie, aplicado especialmente al cabello humano o pelo de animales que luce levantado en la parte anterior

granuja

La palabra granuja, usada a veces como sustantivo (por ejemplo, el granuja) y otras como adjetivo (por ejemplo, un perrito granuja) se derivó del latín “granum”, que se traduce al español, como “grano”. En su sentido original una granuja, es una uva que se ha desprendido del racimo, y también son cada una de las

aferente

La palabra aferente, procede del latín “afferentis” que se integra por el prefijo “ad”, equivalente a la preposición “hacia”, el verbo “ferre” en el sentido de llevar, y el sufijo de agente, “entis”. Un aferente es el calificativo que recibe, aquello que conduce algo hacia el interior de otra cosa, pudiéndose aplicar, por ejemplo, a

aerolito

La palabra aerolito se compone de los siguientes términos tomados del griego: “aer” que significa “aire” y “lithos”, en el sentido de piedra. Se puede decir, entonces, que, en sentido literal, un aerolito, es una piedra aérea, o un fragmento de materia mineral, no ferroso, sino pétreo o rocoso, que ingresa en la atmósfera, procedente

acurrucado

Acurrucado, es el resultado de la acción de acurrucarse, en el sentido de encogerse o agazaparse, haciendo que el cuerpo ocupe menos lugar en el espacio. Es probable que el término provenga del latín “corrugare”, que significa “arrugar”. Para poder estar acurrucado, el cuerpo debe doblarse, para hacerse más pequeño, lo que suele hacerse de

aclimatar

Aclimatar, es un verbo regular, pronominal (admite conjugación reflexiva) y de primera conjugación, que llegó al español, desde el francés “acclimater” que implica la acción de adecuarse a las condiciones meteorológicas medias de una determinada zona geográfica. Por extensión, se aplica a acostumbrarse a condiciones de vida, diferentes a las habituales, más allá de lo

ceño

La palabra ceño, nos llegó desde el latín “cingŭlum”, que se refiere a un “ceñidor”, que es algo que ajusta o aprieta otra cosa. La primera acepción de ceño, es la de aludir a cualquier objeto que ciñe o comprime. Aunque el verbo ceñir, en presente, del modo indicativo, es “yo ciño”, el ceño es

ardiente

La palabra ardiente es un adjetivo, que procede del latín “ardentis” y que alude a lo que causa ardor o quemazón, por estar muy caliente o encendido, en sentido literal o figurado. En sentido literal, lo usamos para hablar de cosas que se están quemando o están sumamente calientes, y decimos, por ejemplo: “Los leños