Ciencias Naturales Archive

saciar

Saciar es un verbo regular y pronominal, de primera conjugación, cuyo origen se remonta al vocablo latino “satiare”, derivado del adverbio “satis” que puede traducirse como “bastante” o “suficiente”. Es por ello, que saciar es bastar, satisfacer o lograr aquello que resulta suficiente, para calmar una necesidad. La acción de saciar es aquella por la

plomo

La palabra plomo procede, del término latino, tomado como préstamo de la lengua ibérica, “plumbum”, formado de la onomatopeya del ruido que hace algo pesado al caer, “plum”. En química, y en la tabla periódica, el plomo es un elemento químico, de número atómico 82, siendo su símbolo Pb, atendiendo al origen latino del término.

recaída

La palabra recaída es la acción y el efecto del verbo recaer, integrado por el prefijo de reiteración “re”, y por el verbo latino “cadere”, que se traduce como “caer”, por lo cual una recaída significa literalmente “volver a caer”. Es en Medicina donde se usa con mayor asiduidad la expresión recaída, cuando el paciente,

golosina

La palabra golosina, procede del adjetivo goloso, que se derivó del latín “gulosus” en el sentido de glotón o que siente gula o deseo excesivo por comer, más el sufijo “ina” que se traduce como “materia de”. Una golosina (conocida como dulce en Chile, como chuche en España y como chuchería en Venezuela) es una

masticación

La masticación es la acción y el efecto del verbo masticar, del latín “masticare”, que es el hecho de triturar la comida que ingresa a la boca, para comenzar el proceso de la digestión. Los seres humanos masticamos, al igual que lo hacen todos los mamíferos, y con ello potenciamos la energía y los nutrientes

volátil

La palabra volátil es un adjetivo que procede en su etimología del latín “volatilis”, término que se integra por el verbo “volare” en el sentido de volar, y por el sufijo de posibilidad “il”. De acuerdo a su etimología, entonces, algo volátil es lo que tiene la capacidad de volar, que consiste en elevarse en

harpía

Harpía o arpía (ambas variantes de escritura son correctas) procede del griego Άρπυια (léase “harpya”) con el significado de ser la cualidad de quien vuela, destruye y saquea. Con el término harpía se nombraba en la mitología griega, a dos mujeres bellísimas, Aeleo, que era el viento impetuoso, y Ocípete, el viento rápido, dotadas de

parestesia

Como muchos términos médicos, la palabra parestesia tiene su origen en la lengua griega, y su uso extendido data del siglo XIX. Está integrada por los siguientes términos: el prefijo “para” que en este caso se usa como “al margen” o “en contra”; “aesthesis”, que se traduce como “sensación”; a lo que se le añade

alicaído

La palabra alicaído es compuesta, ya que se integra por el sustantivo ala (costado, flanco, hombro o apéndice de las aves, que les sirve para el vuelo, en muchos casos) y caído, que designa a la cosa o ser vivo que está fuera de su sitio, derrotado, muerto o vencido. En este caso, la unión

ofuscado

Ofuscado es el participio del verbo regular, de primera conjugación, ofuscar, que etimológicamente nos remonta al vocablo latino “offuscāre”, integrado por el prefijo de contraposición “ob”, y por el verbo el adjetivo “fuscus” que significa “oscuro”. Por ello ofuscado es quien tiene su pensamiento falto de claridad, luz o turbado. La ofuscación puede deberse a